Bebés de ballena franca del Atlántico norte en peligro de extinción avistados

Cambio climático

La ballena franca del Atlántico norte se encuentra entre las especies más amenazadas y solo quedan aproximadamente 411 en el mundo. Sin embargo, se vieron dos crías en Cape Cod, lo que eleva el número a tres para el año en esa área. Otros siete fueron vistos frente a la costa de Florida y Georgia.

Esta es una muy buena noticia para la especie.

Durante muchos años, la cantidad de ballenas francas del Atlántico norte que morían era mayor que la cantidad de ballenas que nacían. Entre otros factores, esto ha llevado a la especie al borde de la extinción. Pero, gracias a los esfuerzos de conservación, ahora se están avistando ballenas jóvenes.

¿Por qué la población se ha vuelto tan pequeña?

Red de pesca

Desafortunadamente, esta especie de ballena ha tenido una historia muy difícil. Las ballenas francas del Atlántico norte fueron cazadas hasta casi la extinción en el siglo XIX y recibieron el estatus de protección en 1935. Sin embargo, incluso con los cazadores desaparecidos, este mamífero todavía tiene muchos problemas.

Para empezar, las ballenas francas hembras del Atlántico norte solo alcanzan la madurez sexual a la edad de 10 años. Esto hace que sea muy difícil concebir nuevas ballenas, ya que la ballena hembra primero debe sobrevivir durante 10 años en la naturaleza. Esto puede ser extremadamente difícil porque la interferencia humana es uno de los mayores peligros.

Si bien las ballenas no han sido cazadas en años, eso no significa que estén a salvo de los pescadores. Muchas de las ballenas sobrevivientes tienen cicatrices de enredos por haber sido atrapadas en una red de pesca. Si bien esta puede no ser la intención de los pescadores de la zona, está sucediendo. Y está lastimando a las ballenas.

Además de esto, es común que choquen con barcos.

Además de todas estas dificultades, las ballenas ahora deben lidiar con los efectos nocivos del cambio climático y la contaminación plástica. El calentamiento de las temperaturas del océano, debido al calentamiento global, está obligando a los peces a migrar a un lugar diferente, lo que interrumpe sus fuentes de alimento . La contaminación plástica está literalmente matando a millones de peces cada año y muchas ballenas terminan muertas en una playa con el estómago lleno de plástico.

Los esfuerzos de conservación están funcionando

Si bien estas ballenas todavía están en grave peligro y se enfrentan a la extinción, los avistamientos recientes de crías son una gran noticia. Las hembras se reproducen cada cuatro años, lo que puede hacer que la repoblación sea un proceso muy lento. Sin embargo, estos avistamientos valen la pena. Mientras continúen los esfuerzos de conservación, esta ballena no se extinguirá pronto.